La salud de los niños, adolescentes, enfermos crónicos y adultos mayores del Hogar Miguel León de la ciudad de Cuenca está a cargo de 26 personas, quienes reforzaron sus conocimientos con la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa) para aprender a identificar la información de la etiqueta de un medicamento y evitar la falsificación o adulteración del mismo.

En este centro suministran medicamentos a diario, sobre todo a los adultos mayores; por ello resulta de gran apoyo que manejen herramientas como la aplicación Arcsa Móvil, que les permita ingresar los datos del producto, comprobar su Registro Sanitario y la validez del mismo.

“Considero vital conocer sobre el manejo de la información de los medicamentos, tanto para cuidar de los niños, adolescentes y adultos mayores, así como para enseñar a mis hijos a leer con detenimiento los datos que vienen en la caja o frascos de medicinas”, manifestó Alicia Riera, quien labora en el Centro.

“Es gratificante aportar con la comunidad para que esté informada y conozca que en el mercado hay medicamentos y alimentos falsificados”, aseguró Lady Gavilánez, técnica de Arcsa, “pero al aprender pasos básicos del manejo adecuado de la etiqueta de estos productos permite garantizar y cuidar su salud”.

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