Como parte de su misión de facilitar el desarrollo del sector productivo nacional a través de una atención ágil y expedita a sus usuarios, la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa) visita establecimientos que elaboran productos de uso y consumo humano para controlar sus condiciones higiénico-sanitarias y brindar asesoría técnica que les permita mejorar sus prácticas de manufactura, garantizando así una producción inocua y segura para sus consumidores.

Con este objetivo, técnicos de la Coordinación Zonal 2 de Arcsa realizaron controles en plantas procesadoras de lácteos en las provincias de su jurisdicción (Napo, Orellana y Pichincha rural), para evidenciar el cumplimiento de las Buenas Prácticas de Manufactura (BPM) y que mantengan las adecuadas condiciones higiénicas en sus instalaciones, equipos, implementos y personal.

Las industrias de lácteos se incluyen en los establecimientos sujetos a control sanitario por parte de Arcsa, tal como lo señala el Art. 132 de la Ley Orgánica de Salud.

Durante esta semana, Arcsa ha inspeccionado 40 plantas de lácteos en Pichincha (donde se encuentra el 88% del parque industrial lácteo del país), donde también se capacitó en adecuadas condiciones higiénico-sanitarias a 80 representantes de estos establecimientos y se les socializaron los beneficios de la aplicación «Arcsa Móvil».

Sebastián Mulky, coordinador zonal 2 de Arcsa, señaló que estos controles en territorio se realizan de acuerdo a una planificación: “Se efectúa la asistencia técnica y capacitaciones para precautelar la salud de los ciudadanos y obtener de la industria el compromiso de mejorar las condiciones sanitarias para obtener productos de calidad”.

Cabe destacar que la Zona 2 abarca 169 industrias lácteas, de las cuales el 75% han sido controladas por Arcsa y se espera cumplir en su totalidad hasta finales de este año.

 

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