Como parte de los controles permanentes que realiza en las plantas procesadoras de lácteos del país, la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa) verificó establecimientos de este tipo en parroquias rurales del Distrito Metropolitano de Quito y determinó que dos de ellos no cumplían las adecuadas condiciones higiénico-sanitarias para el manejo de alimentos.

En estas plantas, ubicadas en el sector Ubillús de la parroquia rural de Píntag, técnicos de la Agencia detectaron que se producían quesos sin Notificación Sanitaria, no contaban con el Permiso de Funcionamiento correspondiente y mantenían irregularidades en la higiene de infraestructura, equipos y personal, por lo que se procedió a su clausura temporal.

La medida se tomó para precautelar la salud de la población, iniciándose el proceso sancionatorio especial como establece la Ley Orgánica de Salud.  De esta forma, Arcsa cumple con su misión fundamental de garantizar productos seguros e inocuos para el consumo de la ciudadanía.

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